Los compañeros y compañeras de CGT Mar y Puertos nos informan de un asunto grave, de la mayor importancia, ocurrido en el puerto de Santander: dos trabajadores de la plantilla de la empresa REMOLCADORES UNIDOS SL, operativa en el ya mencionado puerto español y compuesta por nueve trabajadores, habían establecido contacto con CGT para denunciar las gravísima situación laboral a la que estaba sometida la plantilla integrante de la referida empresa: ausencia de convenio colectivo, jornadas laborales con exceso de horas trabajadas, inseguridad en el propio ejercicio de las labores asignadas, y un largo etcétera de circunstancias y motivos.

 

      Ambos dos han sido… ¡despedidos!

 

      Los compañeros implicados en este despido promovieron la creación de una sección sindical de CGT ante esta situación, y lo consiguieron con pleno éxito. El siguiente paso, promover unas elecciones sindicales (recordemos que, aunque alguna gente parece ignorarlo, vivimos en un estado democrático, donde celebrar elecciones sindicales es un derecho reconocido y desarrollado) como camino claro y definido para encarrilar tan desastrosa situación laboral, les ha pasado factura. Una vez más, la represión y el atropello de los derechos laborales de los trabajadores y trabajadoras han primado sobre cualquier otra referencia.

 

Esta reacción represiva e irresponsable por parte de la empresa REMOLCADORES UNIDOS SL no sólo es inaceptable por el hecho en sí de conculcar derechos laborales sin el más mínimo miramiento y de forma ridícula; esta acción deja sin medios de vida a dos trabajadores, en los difíciles tiempos que vivimos y que de todos y todas es conocido por lo que encontramos en la calle a diario, siendo el único (¡y gravísimo!) motivo para ello defender aquellos derechos que le son naturales, aparte de reconocidos. 

 

      La empresa cántabra REMOLCADORES UNIDOS SL, fundada en 1962, controla a través de la entidad RUSA Santander SL la concesión del servicio de remolcadores portuarios de Santander junto a otra compañía (REYSER Santander SL), además de la concesión del mismo servicio de remolcadores en Málaga y, desde julio de 2011, también controla la compañía Remolcadores de Barcelona SA. Todo un imperio comercial… que se dedica a la explotación sin medida y a la represión de los trabajadores, como en los mejores tiempos de su época de fundación…

 

      Desde esta entidad sindical hacemos un llamamiento a los trabajadores y trabajadoras en general (sean del ámbito portuario o no lo sean) a plantar cara ante tamaña desfachatez sin sentido, que ataca a los derechos básicos de los trabajadores y trabajadoras y que va más allá, al poner en peligro la seguridad en la actividad de un puerto y, por ende, de una ciudad entera, la de Santander.

 

      Seguiremos MUY atentos y atentas al desarrollo de este conflicto, y os pedimos a todos y a todas lo mismo: nuestra solidaridad con los compañeros despedidos y nuestra más firme repulsa ante estas actitudes caciquiles y represivas, increíbles por inaceptables en el siglo XXI.

 

¡Salud!